En estos días a una sesión llegó una atleta, y me conectó con la pasión y el compromiso cuando uno hace lo que ama. Es que cuando alguien ha encontrado lo que verdaderamente le apasiona, eso no se negocia con nada.
En mis sesiones he visto llegar personas apocadas, con la vista perdida, con el alma olvidada, a razón de no escuchar el llamado de su alma, por no permitirse moverse hacia aquello a lo cual aman y les da sentido a su existencia.
En esta sociedad hemos sido educados de tal manera, que el éxito se traduce por el dinero que se gana, por los bienes que hemos acumulado, los títulos obtenidos, por el puesto o prestigio conseguido, pero nada de eso vale si mi alma no se regocija haciendo lo que hago laboralmente, si no hay disfrute en lo cotidiano, si lo que hago no le da sentido a mi vida.
La vida es mucho más simple, no nos exige complacer a nada externo, sino simplemente a nosotros mismos. Haciendo aquello a lo cual nos sentimos profundamente atraídos de realizar y de plasmar en el mundo. Y una vez que nos hemos permitidos escuchar el verdadero deseo de nuestro corazón, y realizar los cambios que mi nuevo yo necesita, dejando todos los miedos de lado, el universo entero conspirará, para que aquello que a mi corazón inspira, inspire a otros y eso me traerá el verdadero éxito, que se traduce en un alma plena y disfrutando lo que se hace, y el resto nos llegará por añadidura.
Nadie puede ser verdaderamente abundante (entiéndase en el sentido amplio, no solamente dinero) si no ha encontrado aquello para lo cual se siente llamado de realizar en el mundo y en la vida. Deberé preguntarme en que medida estoy colaborando en mejorar la vida de otros, que tan feliz me siento haciendo mi trabajo, con que energías me siento cuando tengo que cumplir con mis tareas. Si mis respuestas a estos interrogantes son la apatía, el cansancio y el desinterés, deberé replantearme si estoy cumpliendo con el llamado de mi alma, con aquello que a nivel profundo nos hemos comprometido a realizar. Todas y cada una de las personas tienen algo único que entregar al mundo: ¿vos ya encontraste cual es lo tuyo
Gianina A. Guevara
Canalizadora de Registros Akáshicos Unificados. Facilitadora y formadora en Terapias energéticas y vibracionales. Terapeuta floral.